Nuestros gestos faciales son en parte culpables de la aparición de las arrugas, que se convierten en una señal que evidencia las expresiones que empleamos con más frecuencia. Está claro que identificarlos te ayudará a evitar abusar de ellos y tener así una piel más joven.
No se trata de que vivas como una momia sin hacer ni una sola expresión. Sonreír, gritar, enojarnos es parte de nuestro día a día, pero los gestos que hacemos para mostrar estas emociones tienen su repercusión en nuestra piel y algunos de ellos, todos menos sonreír que es maravilloso, pueden corregirse para disminuir su impacto.
Aunque sonreír o reír con frecuencia es uno de los principales causantes de las arrugas en el contorno de ojos y la comisura de los labios, esta expresión es tan maravillosa que cuando más la hagamos mejor para nuestro bienestar. Sin embargo, otras no son tan positivas, por lo que podemos controlarlas para prevenir la aparición de marcas siguiendo estas recomendaciones:
- Menos expresiones de miedo o gritos, pues al parecer estas son de las que más arrugas causan. Evita exagerar estas emociones si deseas que tu frente y comisuras de los labios estén a salvo.
- ¿Enojada? Expresa tus emociones sin fruncir el ceño o pronto comenzarás a notar arrugas entre tus ojos. Este gesto es fácil de corregir si eres consciente de cuánto lo repites.
- Usar gafas cuando lo necesite es vital para evitar no entornar los ojos en un gesto que llena de arrugas el contorno de ojos y el ceño. En los días más iluminados y calurosos debes usar gafas de sol para proteger esta zona y evitar el típico gesto para enfocar mejor la mirada, del mismo modo si te cuesta ver visita al especialista para utilizar las gafas que te correspondan.
Ayuda a tus cremas antiedad a tener un mejor efecto corrigiendo esos gestos que dejan huellas en tu piel.
Fuente: Nosotras.es